sábado, 8 de diciembre de 2012

HIPERACTIVIDAD PIRATILLA


Estaba surcando los mares de Internet y di con este artículo de  Ángeles Caso ... y me dije "Piratilla" tienes que compartirlo. 

Al leerlo he sentido como las olas de mi mar interior se revolucionaban y se emocionaban. ¿Por qué?, simplemente porque con sus palabras Ángeles me ha llegado al corazón. Al leerla he sentido, lo mismo que siento yo muchas veces, y es que la vida "son dos días". 

Es cierto lo que dice, que cuando ves a gente a tu alrededor que sufre enfermedades graves, te cambia la visión del mundo y de la vida en general. Bueno por lo menos a mi me cambió. 

Eso si, a veces siento que con este cambio soy como un torrente de agua, como un terremoto, como el fuego que abrasa y al intentar saborear cada momento, y al intentar estar en cada momento o cada instante me agoto. 

Este tipo de sensaciones las suelen tener muchas personas cuando pierden a un ser querido, y sobre todo tras una enfermedad larga y dura. La persona se va, y tu te quedas. Y piensas no me queda tiempo, no puedo desperdiciarlo. Y "La Piratilla" que llevas dentro, empieza a maquinar y a planear todo tipo de abordaje de actividades, sin límite ni control. Y las actividades pueden ir desde viajar cada mes a un sitio distinto, hasta organizar fiestas, quedar en un fin de semana por la mañana, por la tarde y por la noche. Apuntarte a un curso para hacer pan y a otro de reparación de barcos, y tener tiempo para acompañar a tu amigo a comprar un regalo, a hacer la mudanza a otro, ir al médico con tu madre, correr, ir a danza del vientre, trabajar, llamar por teléfono a tus amigos y familiares, forrar una caja de cartón, ser voluntaria, leer un libro de caballerías, bailar hasta caer redonda, apuntarte a un taller de esgrima..., y finalmente después de todo esto caes rendida en tu camarote y te duermes con el sonido del mar o no. 

Pero la pregunta que le podrías hacer a esta "Piratilla" sería: ¿Por qué todo esto?, y la respuesta sería, porque no hay tiempo. Porque quiero aprovechar al máximo. Porque lo que haces en cada momento es lo que hay, porque el mañana no existe. E incluso podría decirte, podrás haber abordado un barco y haber robado su botín y tener tu mansión llena de oro y joyas, pero lo más importante que tienes no son esas cosas. Lo más importante que tienes son los momentos que compartes con los que quieres, lo más importante son los instantes que disfrutas con distintas experiencias, lo más importante son los aprendizajes que puedes llegar a adquirir en cada momento, en cada instante. 

En esos instantes, "La Piratilla" está borracha por hiperactividad. Se ha bebido todo el Ron que tenía en el barco, porque mañana puede que naufrague y no quiere no haber disfrutado al máximo el momento. Siente que todo se le escapa por momentos: las velas, los cañones, los vientos, el ancla, su timón, sus marineros, el grumete..., y se asusta y vive al máximo porque no quiere arrepentirse de no haberlo hecho. 


¿Y cuándo sucede esto?, o mejor dicho ¿por qué le pasa?, 

                      .., porque perdió a su Capitán y en el fondo perdió el norte, la brújula y los mapas. Todo ello se fue con él. Y para no sentirse perdida en los océanos de la vida, se embarca en múltiples batallas experienciales, porque necesita llenar su tiempo con ellas. Piensa que al hacerlo se sentirá mejor, y huye de los mares en calma, porque en ellos tiene tiempo para pensar y no quiere que la tempestad de pensamientos inunde su mente y la haga llorar y caerse por la borda. 


Pero, pero, pero..., ella ahora sabe que tiene que parar, pensar, dejarse caer pero con flotador y nadar. Y también tendrá que planificar nuevas batallas experienciales, pero para construir una nueva vida, y para vivirla como expresa Ángeles en su escrito, pero sin ansiedades y sin múltiples actividades ventisqueras. 

Con esto quiero decir, que como a la "Piratilla" a todos puede pasaros que perdáis a un ser querido y de pronto para llenar el hueco, necesitéis ocupar vuestro tiempo. Y es lógico y normal, pero también tendréis que parar, y buscar vuestro sitio, y a veces llorar, y a veces reír, y a veces pasarlo mal y a veces empezar a vivir de nuevo. 


Ocupad el tiempo, pero también ocupaos de vuestra mente y vuestro corazón. Es muy importante para recuperaros. 

miércoles, 5 de diciembre de 2012

El retorno..,esperando continuar y con consejos que dar


Creé este blog para hablar de mi experiencia intentando superar la muerte de Raúl, y también las secuelas que me dejó la ELA. Y también mi objetivo era plasmar como poco a poco puede uno recuperarse de una pérdida tan grande y del dolor. 

Comencé este blog, escribí una vez y lo paré. No he vuelto a escribir desde entonces. ¿Por qué? Sencillamente porque no sabía que escribir, excepto hablar sobre el dolor, la soledad, la tristeza, la decepción y la sensación de no ser importante. No quería escribir sobre cosas tristes, quería escribir sobre temas alegres, para que aquel que entrase aquí pudiera sentirse mejor, si había perdido a alguna persona cercana, viendo que yo me estaba recuperando. Y claro como no soy nada falsa, no he podido escribir sobre cosas que no son. 

Durante este tiempo, desde que inicié el blog y hoy, he estado dando tumbos, sin rumbo. Intentando ocupar el vacío que me dejó la marcha de Raúl. Pero nada ha surtido efecto. Él no está, y yo me siento peor ahora que aquel 24 de septiembre de 2010 o por lo menos a mi me lo parece, aunque se ven luces al fondo, jiji. 


¿Por qué me siento así?

Porque en los meses anteriores yo tenía la sensación de existir. Ahora es como si no existiera. La vida pasa al lado, a los demás le pasan cosas y a mi no me pasa nada. Bueno ha habido cambios en mi vida, y podría alegrarme por ellos, pero no puedo hacerlo porque no estoy bien. No avanzo. Estoy paralizada y además sé que eso asusta a los de alrededor. 


Han pasado dos años desde la muerte de Raúl, y cuál es la sensación..., 
la sensación es de soledad. 


Pero no quiero estar así y no quiero que nadie se encuentre como yo me encuentro ahora. Por eso voy a dedicar esta entrada a dar unos consejos a aquellos que tengan a alguien cerca que haya perdido a un ser querido: 


1. La persona que pierde a un ser querido, no se encuentra bien de la noche a la mañana. Puede sonreír, reír, incluso parecer que está alegre, pero cuidado es su barrera de protección. Atentos que puede desmoronarse o estar hundido y no os estáis enterando. 
2. Te imaginas que perdieras a tu pareja o a tu hijo, ¿cómo crees qué te sentirías?, ya te lo digo yo: Perdido y con la sensación de no encajar en ningún sitio. No dejes sola a la persona que ha perdido a alguien, cuídala, y presta atención a su evolución. No se trata de que estés a todas horas con ella, el objetivo es que ella no sienta que tu estás ahí.
3. En dos años una persona no supera el duelo. No se puede decir en cuánto tiempo, nadie lo sabe. Pero puedes ayudarla a que el camino sea menos escabroso, si intentas compartir tu tiempo con ella. No le ofrezcas migajas, a ti no te gustaría que lo hicieran contigo. 
4. Cuando el ser querido se va, la persona que le pierde, en un primer momento no está solo. Los demás están ahí, e incluso dicha persona tampoco es muy consciente de lo que le pasa. Digamos que uno se deja llevar. Según va pasando el tiempo, todo se normaliza, pero hasta tal punto, que llega un momento que los demás hacen su vida y hay poco espacio para aquella persona que aún no ha superado el duelo. Está claro que la quieren, que se acuerdan de ella, pero saben realmente si está bien. En este momento pueden pasar dos cosas, la persona está genial, o está mal. Si está mal, puede pedir ayuda o no pedirla y esperar a que alguien le tire un cable. No esperéis a que pida ayuda, tirarle el cable, tirarle el salvavidas, es muy importante. 
5. Cuando alguien pierde a un ser querido necesita hablar del dolor, de la tristeza, de las sensaciones extrañas..., pero también necesita que le hagan reír, que le propongan planes, y que cuenten con él. Y normalmente al principio y durante mucho tiempo es así, pero con el paso del tiempo lo normal es relajarse. Cuidado porque le puedes hacer entender que no os importa. 
6. Si te importa la persona que está en fase de duelo, hazle propuestas, manten tu amistad, o tu relación familiar con ella. Mima esa relación, pero no solo por esa persona, también por ti. 
7. Podría seguir dando pistas o consejos, pero lo más importante es: no abandones al que está en fase de luto, porque sin tu saberlo, puede estar en un momento muy duro y no tener fuerzas para levantarse solo. ¡ojo!, piensa aquello: ¿Qué me gustaría a mi, si yo estuviera en su lugar?


Hoy se ha roto el hielo. He escrito en este blog. Quiero que sea algo positivo para mi, y para otros que puedan pasar por lo mismo, pero también para aquellos que les roce algo parecido en sus vidas. Hoy lo tenemos todo, mañana podemos perderlo, y está en nuestras manos alargar la mano y tirar de otro. Y está en nuestras manos, en levantarnos si lo pasamos mal, sacar fuerzas de donde no las hay y decirnos ¡¡ TU PUEDES !!, porque te mereces ser feliz. 


Adelante retadores del duelo. Otros podrán echaros un cable, pero sois vosotros y nadie más quién más podrá ayudaros. Este proceso de duelo es una conquista, y tenéis que empeñaros en conseguir el objetivo, porque la vida sigue y merece la pena vivirla. 


¡¡ FUERZA Y PA ALANTE MIS VALIENTES !!